domingo, abril 16, 2006

Ayer

Ahí vienen. No me sueltes. Abrázame...no me digas nada, sólo abrázame. Es un efímero momento eterno. Sus retinas nos observan, incrédulas. Llueve, y no sólo en la calle.

1 comentario:

Marito85 dijo...

Gracias Raquel por influenciarme xD