martes, mayo 16, 2006

Olor a tranquilidad

Tumbado, en la hierba. Bajo el Sol, calentándote la cara, cerrándote los ojos. No quiere que le mires, es tímido.
Alguna nube, pasajera, viajante en el tren del viento que sopla sobre unos raíles imaginarios, le hace un favor y oculta momentáneamente a mi querido Lorenzo.
Oyes cantar a los pájaros. Intentas no pensar en nada. Incluso lo consigues.
Notas la hierba rozar tu nuca. Una leve brisa mueve tu pelo, y te arranca una sonrisa de satisfacción que dentro de poco echarás de menos. Esa misma brisa mueve las hojas de los árboles, susurrantes, inquietas, fuentes de vida y de sombra.
Respiras aire, ya no puro, pero si bastante natural. Olor a tranquilidad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

a este ni puto caso. esta como unha puta cabra. pero do todas formas e unha cabra especial. e unha cabra q nunca sacrificaria por ningunha ofrenda. e como me estou poñendo sensiblon vou deixar este comentario aqui. un saludito marito.